Especies: Sativa, Índica, Ruderalis

Especies: Sativa, Índica, Ruderalis

¿Cuáles son la especies de cannabis?

En 1753, gracias al sistema moderno de clasificación de organismos, el botánico sueco Carlos Linneo hizo la primera clasificación de cannabis. Con el tiempo, los debates entre la comunidad científica ha llegado a algunos consensos.

El cannabis se puede dividir en 3 especies principales: Cannabis Sativa, Cannabis Índica y Cannabis Ruderalis.

Cannabis Sativa es la más conocida, se puede dividir en 2 subespecies: Cannabis Sativa (mariguana) y Cannabis Sativa L. (Cáñamo/Hemp). La primera tiene altas concentraciones de cannabinoides (sobre todo de thc), la mayoría de las personas le dan un uso recreativo. La segunda se usa principalmente para aplicaciones textiles o industriales. 

Cannabis Índica también tiene altas concentraciones de fitocannabinoides, sin embargo el efecto que genera en el organismo humano es distinto. Cannabis Ruderalis es una especie particular que tiene altas concentraciones de CBD. 

¿Cuáles son las principales diferencias entre Sativa e Índica?

La primer diferencia observable es la apariencia.

Las plantas Sativa suelen crecer mucho y pueden alcanzar una altura similar a la de un árbol (3 metros) en exterior. Sus ramas crecen separadas y desarrollan flores (o cogollos) en un lapso de 60-90 días. 

Por otro lado, las plantas Índica son de menor tamaño, en exterior no sobrepasan el metro y medio de altura. Sus ramas están más pegadas entre sí porque están más pobladas, lo que la hacen parecer un arbusto. Sus cogollos crecen en racimos, son más densos y pesados. Sus hojas son más grandes y su color más oscuro. Tardan 45-60 días en florecer.  

La segunda diferencia es el efecto.

Las índicas son famosas por sus potentes efectos sedantes, tanto para uso recreativo como medicinal (dolores o insomnio). Debido a ello, su consumo es común en las noches. 

Las sativas son famosas por producir el "high", el popular efecto que mejora el estado de ánimo y eleva los niveles de creatividad. A muchos les gusta consumirla durante el día para momentos sociales o productivos. Aún hay debate científico sobre su eficacia para tratar la depresión o el deficit de atención; sin embargo esos también son los usos comunes que se le dan a la planta.

La tercera diferencia es el origen geográfico.

Aún hay debates en torno al origen geográfico, pues los primeros registros de la existencia de cannabis data de miles de años. Sin embargo, ambas plantas apuntan como origen en el continente asiático. En el caso de la especie Índica (como su nombre lo indica) se relaciona con la India gracias a una descripción que hizo Jean-Baptiste Lamarck en 1785, de unas plantas que recolectó en ese país.  La mayoría de los bancos de semillas coinciden en que esa es su ubicación endémica. En la actualidad, dicha especie crece de manera natural en la parte sur de la cordillera del Himalaya. Crecen muy bien en temperaturas frías y con altitudes elevadas.  

Por otro lado, el origen de la Cannabis Sativa sigue en discusión. Sin embargo, expertos coinciden que proviene de una latitud próxima al Ecuador, debido a la naturaleza tropical de la planta. Se estima que pudo provenir de lugares cálidos como Tailandia o el sur de China. 

¿Existen las variedades híbridas?

Como habrás leído, cada variedad tiene sus beneficios y características propias. Por lo que la ciencia, así como los cultivadores, han buscado la manera de sacar provecho a cada especie con nuevas variedades que tengan cualidades o genes más concretos.

Últimamente las variedades híbridas han cobrado popularidad porque combinan aspectos clave. Como las condiciones de cultivo, la abundancia de cogollos, el tiempo de floración o efectos particulares para su consumo.

¿Y la especie Ruderalis?

Su descubrimiento es reciente, su primer registro se hizo en Rusia en los años 40 y se cree que es originaria del sur de Siberia. Esta especie es la más pequeña, crece menos de un metro (60-80cms) y madura en menos de 2 meses. Sus concentraciones de THC son bajas. 

Su uso es poco común, pero ha ganado terreno entre los cultivadores, quienes la usan para generar nuevas variedades híbridas con Índica o Sativa. Ya que sus genes permiten varios cultivos al año y alcanza la floración de manera autónoma; sin importar la cantidad de horas de luz a la que está expuesta. 

 

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